3 Mayo 2025, 13:16
Actualizado 3 Mayo 2025, 13:16

La lluvia no pudo apagar la llama de la tradición en Tornavacas, donde anoche se celebraron, como cada 2 de mayo, los Días del Fuego, una fiesta antigua y cargada de emoción para los vecinos de la localidad cacereña. Veinte grandes hogueras, hechas por ellos mismos con troncos de cerezos viejos, iluminaron las calles del municipio en una noche que ni la lluvia logró apagar.

Origen incierto

Aunque el origen exacto de esta tradición se pierde en el tiempo, lo que sí permanece claro entre los habitantes es su sentido: quemar lo malo y lo viejo para dejar paso a lo nuevo. En palabras de una vecina, “el fuego limpia y renueva”.

Una vez encendidas las hogueras, las brasas no solo alimentan el espíritu, también el estómago. Chorizos, pancetas y otros productos de la tierra se asaron en las lumbres en una cena compartida entre vecinos y visitantes. De hecho, muchos turistas, sorprendidos por el ambiente, coincidieron en señalar la fuerza visual del fuego: “Tiene magia".

Días de Fuego de Tornavacas

Esta mañana, la romería de la Santa Cruz pone el broche de oro a estas celebraciones en Tornavacas.