Quienes estos días paseen por la Plaza de la Coronada, en Villafranca de los Barros, van a ver un auténtico mosaico de ganchillo que inunda el recinto de color y ofrece un poquito de sombra a sus visitantes.
A ello le han dedicado muchas horas y cariño un centenar de mujeres de la localidad. Es un manto de 640 mandalas, para las que han utilizado 1.100 madejas de lana.
Y lo han hecho en tres semanas y media, dentro de un taller solidario. Las participantes tienen entre 9 y 88 años.
A los vecinos les ha encantado la iniciativa.