Aunque el plan de la Junta es que ambas provincias vayan de la mano en esta desescalada, el Ejecutivo extremeño no olvida que hay zonas que podrían ir más deprisa. En nuestra región hay 128 pueblos ibres del virus. La semana que viene podrá pedirse que estos municipios pasen a la fase dos.
Son pueblos como, por ejemplo, Táliga, en Badajoz. Municipio de 698 habitanteslleva sin ningún caso de coronavirus desde el inicio de la pandemia. Por ello se sienten preparados para pasar a la fase 2. Un adelanto que les permitiría reactivar la vida en el pueblo.
En la provincia cacereña encontramos el pequeño municipio de Villa del Rey. Allí también celebran que durante la pandemia no haya surgido ningún positivo en sus 137 vecinos. Todoe ello a pesar de encontrarse en el área de salud más castigada por el COVID-19. Los villariegos achacan este éxito a la poca población del municipio y a que se han cumplido estrictamente las medidas de confinamiento.