Fue el vídeo más visto, comentado y polémico durante semanas. Muestra a un ciervo y a varios perros despeñándose durante una cacería a mediados de noviembre cerca de Herreruela, en la provincia de Cáceres. El debate se extendió por todo el país e incluso líderes políticos nacionales como Pablo Iglesias llegaron a pedir medidas contundentes contra el rehalero encargado de los animales por supuesto maltrato.
Rehala sin "reproche penal"
La Fiscalía de Medio Ambiente inició entones una investigación, y ahora ha decidido archivar el caso. Según publica El Periódico Extremadura, la Fiscalía estima que no se dirigió allí de forma deliberada al ciervo y además, tras una inspección ocular por parte de agentes del SEPRONA, se comprobó que "no se podía conocer el inminente peligro que se cernía sobre ellos" en la zona donde sucedieron los hechos.
Tampoco se aprecia reproche alguno por la muerte del ciervo porque el rehalero, dice la sentencia, estaba ejerciendo su derecho a la caza sobre una especie cinegética y tenía todas las autorizaciones pertinentes. Contra la decisión no cabe recurso alguno.