El cierre de las Clínicas Ideal deja huella en Extremadura. La medida implica que van a dejar de funcionar las tres clínicas que esa cadena de centros de estética tiene en la región: dos en la ciudad de Badajoz y uno en la de Cáceres.
En todo el país trabajaban en ellos unas 1.500 personas. Ello afectará a decenas de clientes en Extremadura, que tienen en esas clínicas tratamientos ya pagados y pendientes de completarse.
En un comunicado en su web, Clínicas Ideal indica que el cierre de todos los centros propios de esa marca viene motivado por su delicada situación desde la pandemia, sin que hayan fructificado sus intentos por resolverla. El martes se notificaron por burofax los despidos a los trabajadores.
La empresa señala, en especial, a la restricción del crédito bancario. Pide comprensión y añade que tiene abierto un proceso de negociación para redirigir a clínicas de otras marcas a los pacientes con tratamientos ya iniciados. A excepción de ese texto, la página ya no está operativa.
Sus centros ofrecían servicios de depilación láser y estética corporal y facial. La indignación es patente entre los afectados, que se sienten estafados. La Unión de Consumidores de Extremadura recomienda a esos clientes que reclamen el dinero que pagaron por los tratamientos contratados, también la paralización del crédito. Así lo establece la Ley de Contratos de Créditos al Consumo.
Se aconseja, además, solicitar el contrato y los pagos efectuados para demostrar que el tratamiento no ha terminado. Quienes se han visto afectados por el cierre no descartan crear una plataforma.
