15 Abril 2020, 13:18
Actualizado 14 Enero 2021, 03:42

Aumentan las intoxicaciones en los hogares por mezclar productos de limpieza para combatir el COVID-19. En el último mes, el Servicio Nacional de Información Toxicológica ha registrado cerca de 2.000 llamadas por este motivo. El 25% debidas a la mezcla de lejía y amoniaco. Las recomendaciones son claras: leer siempre el etiquetado de los productos y acudir a las fuentes oficiales para saber cuáles son los recomendados. 

El afán por mantener nuestros hogares libres de este virus puede llevarnos a utilizar productos inadecuados o peligrosos. La lejía es el producto que más se mezcla: con alcohol, con vinagre, salfuman, pero, sobre todo, con amoníaco. Carolina Domínguez, representante de la Asociación Nacional de Empresas de Sanidad Ambiental comenta que, “lo más habitual es mezclar lejía con amoníaco. Eso produce una reacción química de la que sale un gas tóxico llamado cloramina que es altamente tóxico y corrosivo”

Intoxicaciones respiratorias o dermatológicas que se pueden evitar con información veraz. Por ejemplo, acudiendo al listado de virucidas publicado por el ministerio de Sanidad.También se recomienda utilizar paños desechables para superficies como la encimera de la cocina o los pomos de las puertas. Y, en caso de haber tenido algún positivo, se puede acudir a alguna empresa para la desinfección posterior siempre corroborando que esté registrada oficialmente.

 

TEXTO: Nina Flores

IMAGEN: Canal Extremadura