Los primeros análisis realizados a la partida de aceite de oliva inmovilizado en Extremadura han dado como resultado que este estaba mezclado con aceite lampante, es decir, aceite defectuoso que no es apto para el consumo. Las muestras las ha analizado el laboratorio Agroalimentario de Extremadura, en este caso de la marca "Cortijo del Oro"
Lo ha confirmado el Consejero de Sanidad, José María Vergeles, quien ha asegurado que los hechos son constitutivos de un delito contra la salud pública y, por tanto, pondrán el caso en manos de la justicia. Todavía faltan los resultados del resto de los análisis que se han realizado.
Además, ha anunciado Vergeles, otras dos marcas han sido inmovilizada. Son Esmeralda y Vareado, en las áreas de salud de Badajoz y Mérida. Se unen al listado de marcas que ya estaban paralizadas: Acebuche, Virgen del Guadiana, Cortijo del Oro, La Campiña de Andalucía, Galiaceite 2022, La Abadía, Villa de Jerez, Don Jaén Aceite 2019 e Imperio Andaluz. Todas ellas son marcas distribuidas en Extremadura, pero que no tienen su origen en la región
En total son ya 18.000 los litros de aceites inmovilizados en esta alerta sanitaria. Según informa la Junta de Extremadura, hasta la fecha no hay identificada la presencia de un riesgo para la salud derivado del consumo de estos aceites. Se trata, eso sí, de un fraude por una mezcla de aceites con calidades que no se corresponden con el tipo de aceite que aparece en la etiqueta de los envases, e, incluso, en el caso del aceite analizado, con un aceite no apto para consumo humano.