Puesta de largo, maqueta en mano, blanca, grande, dimensionando su ilusión, de un proyecto que nace hace una década pero que comienza en 2016. Un largo periplo que deriva de su ubicación: una manzana entera entre las calles Moreno Zancudo y San Lorenzo, es decir, pleno casco antiguo pacense. Jesús Ortega lo revitaliza. "Habrá una programación diversa para darle el turista lo que desea para que pueda disfrutar", cuenta el bailaor pacense en la presentación.
"Habrá una programación diversa para darle el turista lo que desea para que pueda disfrutar"
Es un proyecto privado. Ortega ha llamado a muchas puertas, algunas se le han abierto, otras no. Iniciativas Pacenses, donde participan ayuntamiento, Fundación CB, BBVA y Banco Santander, aportan dinero, Caja Almendralejo los préstamos, la Junta de Extremadura las ayudas y Extraval la garantía.
Pero es puramente privado porque suya fue la idea y el desarrollo. Suya y de su madrina, Cristina Hoyos. "Ya me siento extremeña", ha comentado, "esto va a ser estupendo para todos los que le guste el baile. Estaba el cante, la guitarra, pero faltaba el baile".
"Esto va a ser estupendo para todos los que le guste el baile. Estaba el cante, la guitarra, pero faltaba el baile"
Albergará el Museo del Porrina
El centro prevé estar abierto ya para el otoño de 2024, tiene los terrenos, el proyecto de obra, la financiación y definido el contenido: habrá formación, tienda, giras, espectáculos, alquiler de salas, sede del futuro concurso internacional de baile por Jaleos y Tangos de Extremadura y un Museo que conserve y difunda al Porrina de Badajoz.
Los fondos los aporta Paco Zambrano, flamencólogo. "Este centro es fundamental para nuestra tierra, no sólo para Badajoz", ha adelantado Zambrano, "pero aquí en este entorno fue donde nacieron nuestros cantes".
"Este centro es fundamental para nuestra tierra, no sólo para Badajoz"
Paco Zambrano, por cierto, fue el gran impulsor extremeño de que el flamenco fuera declarado Patrimonio Inmaterial de la Humanidad.