No dejan de subir. Los combustibles cuestan cada vez más caros. Cuando entró en vigor el descuento de 20 céntimos por litro aprobado por el gobierno, el 1 de abril, el litro medio de gasolina costaba 1,81 euros y el del gasoil 1,85 euros. Hoy, la gasolina 95 cuesta de media 2,1 euros y el gasoil, 1,97. Por tanto, la subida de precios se ha 'comido' prácticamente la subvención con la que el ejecutivo intentó amortiguar el golpe a los bolsillos de los consumidores.
Según los precios actualizados de las gasolineras extremeñas, en más de la mitad de los surtidores la gasolina 95 o el diésel normal está por encima de los dos euros el litro. Unas cifras nunca vistas en España a las puertas de las vacaciones de verano.
Si nos fijamos en las gasolineras más caras, algunas asustan: hasta 2,19 euros el litro de diésel en una gasolinera de Oliva de Mérida, hasta 2,19 euros el litro de diésel plus en Badajoz, hasta 2,25 euros el litro en una gasolinera de Badajoz y, ojo, hasta 2,48 euros por repostar un litro de gasolina 98 en una gasolinera de Trujillo.
Precios que van a volver a generar protestas: este sábado, la Plataforma Nacional en Defensa del Transporte vuelven a la calle para denunciar en Mérida que su situación hoy es aún peor que cuando se manifestaron hace semanas y que el Gobierno ha ignorado durante este tiempo las mejoras que le plantearon desde su organización.