El sector del ibérico pide poder congelar los productos para salvar la crisis ocasionada por el coronavirus. Aseguran que las ventas han caído más del 80 por ciento y que los precios están por debajo de los costes de producción. Apuntan que podría tardarse más de seis meses en recuperar el consumo y temen que eso lleve al cierre de algunas explotaciones.
Más del 70 por ciento del consumo de productos de cerdo ibérico se da en restaurantes y hoteles ahora cerrados que, además, han devuelto parte de lo ya adquirido o no pueden pagarlo. Las explotaciones porcinas están saturadas, porque no salen los animales, y los ganaderos que ven quen aún faltan meses para recuperar consumo, bajan los precios. Elena Diéguez, de la Asociacion Espanola de Criadores de Ganado Porcino Selecto Ibérico Puro y Tronco Ibérico (AECERIBER) pone cifras a la crisis: "Animales que me cuesta producir más de 24 euros en el caso de cebo de campo, hoy lo estoy vendiendo por debajo de 20; en el cebo convencional, el precio de coste es de unos 20 euros y ya estoy por debajo de los 18. Esto es insostenible en cualquier negocio".
No pueden asumir, por ejemplo, que los lechones o tostones se mantengan en las explotaciones o que los jamones sigan madurando en los secaderos porque, además, perderían calidad. Por eso piden que se permita su congelación.
Temen que por el sacrificio de reproductores el censo de cerdo ibérico pueda descender entre un 30 y un 40 por ciento. Piden ayudas para los ganaderos y campañas para promocionar el consumo en los hogares.
TEXTO: Nina Flores / Juanma Fernández
IMAGEN: Canal Extremadura