El del aceite de oliva es uno de los sectores más afectados en la reivindicación de unos precios justos. Las grandes superficies lo utilizan como reclamo con grandes ofertas y especulan mucho con su precio. En España, producir un litro de aceite cuesta unos 3 euros, aquí están incluídos los costes de producción, del laboreo de la tierra, costes de almazara, carburantes y mano de obra. Estos dos últimos cada vez más caros, entre otras cuestiones por la subida del salario mínimo.
Por debajo de esos 3 euros los agricultores pierden dinero y sin embargo lo están vendiendo en torno a los 2 euros el litro. Teniendo en cuenta que ese mismo aceite en la tienda lo compramos a más de 5 euros, hablamos de un desfase del 250 por ciento. El Ministro de Agricultura, Luis Planas, se ha reunido con el sector para buscar una salida a este problema y ha puesto sobre la mesa un paquete de medidas donde destaca la promoción para el consumo.