13 Marzo 2023, 12:08
Actualizado 13 Marzo 2023, 14:21

La vida útil de la Central Nuclear de Almaraz llega a su fin. Los dos reactores se detendrán entre noviembre de 2027 y octubre de 2028 y su desmantelamiento tendrá lugar durante 2040 y 2041, para, finalmente, cerrarla entre 2050 y 2051.

Es la hoja de ruta que ha marcado el Ministerio para la Transición Ecológica, pero, el debate sigue vivo. ¿Sería posible prolongar la vida útil de la central cacereña? Desde la Junta de Extremadura se han mostrado favorables a apoyar esta ampliación, si así lo acuerdan las empresas energéticas que la gestionan y se ajusta al plan de energía y clima. Desde el Gobierno central se muestran más tajantes en su negativa a prolongarla, tal como indicó, en su última visita a la región, la Ministra Portavoz, Isabel Rodríguez.

En este sentido, el expresidente de la Sociedad Nuclear Española, Héctor Dominguis, señala que, en un contexto actual de calentamiento global, es fundamental el uso de fuentes de energía que sean bajas en emisión de carbono. Según diversos estudios de la Unión Europea y del Panel Intergubernamental para el Cambio Climático, afirma Héctor Dominguis, la energía nuclear aporta lo mismo que las renovables para la mitigación del cambio climático. "Si queremos hacer frente a estos cambios y con una garantía de suministro y coste competitivo de la energía, no podemos prescindir de la energía nuclear", añade.

El sector nuclear genera en nuestro país, contabiliza Dominguis, 20.000 puestos de empleo cualificados y estables, junto a una industria de fabricación de componentes que trabaja en todo el mundo. Además, en términos económicos, las arcas del estado recogen, gracias a las nucleares, 1.200 millones de euros en impuestos y permite un ahorro en emisiones de CO2 de otros 1.200 millones. Cerrar las nucleares, afirma el expresidente de la Sociedad Nuclear Española, supondría que el coste de sustitución de esta energía sería entre siete y ocho veces superior a mantenerlas. Prolongar su vida útil ahorraría, calcula, unos 33.000 millones de euros.

La ampliación de la vida de Almaraz en términos económicos

Con estos datos, para Héctor Dominguis es fundamental prolongar la vida útil de la Central Nuclear de Almaraz porque, afirma, ayudaría a mantener los niveles propuestos de descarbonización para nuestro país y, además, asegurar un precio competitivo de la energía.

Dominguis mantiene que la central cacereña es segura y contabiliza en unos 30 millones de euros el gasto que se destina, cada año, en actualizarla para evitar incidentes. Gracias a ello, considera que Almaraz podría estar abierta 20 años más.

Además, los reactores de la central extremeña generan 16.682 gigawatios/hora, lo que equivale al 6,5% del consumo energético de todo el país o el consumo de todos los habitantes de Sevilla y Valencia, afirma Héctor Dominguis.

Prolongar la vida útil de las centrales, continúa, es algo recomendado tanto por la Agencia Internacional de la Energía como por la ONU, quien ha asegurado que será difícil lograr los objetivos de cambio climático sin ellas.

Alemania y Francia, dos modelos opuestos. Suecia, un modelo híbrido

En Europa, el modelo nuclear genera debate y son dos países, Alemania y Francia, que mantienen dos modelos energéticos radicalmente opuestos. En el caso alemán, cuenta Dominguis, en 2011 cerraron sus 17 reactores, que producían el 25% de la energía del país, para virar a un modelo 100% renovable. Alemania ha tenido que recurrir a restricciones severas, en los meses más duros del invierno y ha pagado la energía más cara de Europa. Además es el país que más ha contaminado en Europa, junto a Polonia por su dependencia del carbón y, actualmente, del suministro ruso.

En el extremo opuesto está Francia, donde la apuesta por la energía nuclear es clara, y que supone el 70% del consumo energético del país.

Para el expresidente de la Sociedad Nuclear Española, lo interesante es un modelo mixto, como el de Suecia, donde el 60% de la energía es renovable y el 30% procede de las nucleares. Esto ha permitido que, entre 2019 y 2022, el aumento del coste de la electricidad ha sido del 25% en el país nórdico, mientras que en España, en ese mismo periodo, el aumento ha sido del 316%.

Los ecologistas se oponen frontalmente a la ampliación de la vida útil: "La humanidad no sabe qué hacer con los residuos nucleares"

En el lado contrario a las posiciones favorables a la ampliación de la vida útil de las centrales nucleares están los ecologistas. Para Ángel García Calle, coordinador de Ecologistas en Acción, prolongar la duración de Almaraz supondría "un peligro para la humanidad".

Desde su punto de vista, el verdadero peligro de las nucleares está en los residuos que generan. Residuos que mantienen su reactividad centenares e incluso miles de años. "Es cierto que no provocan CO2 -cuenta García Calle- pero producen residuos que no sabemos cómo gestionar y usamos la técnica del avestruz: los enterramos y que sea lo que Dios quiera".

Además de los residuos, los ecologistas ponen el foco en el peligro de accidentes. Peligro que consideran elevado en Almaraz. El coordinador de Ecologistas en Acción considera que los dos reactores de Almaraz son antiguos y están obsoletos. De hecho, continúa, fueron fabricados por Westinghouse, una empresa que quebró. Además, en el momento de su construcción, tenían una vida útil de 40 años. Plazo que ya se ha superado.

Ángel García Calle considera temeraria la posición de la Junta de Extremadura, favorable a la ampliación de la vida útil de Almaraz si las empresas que la gestionan lo consideran oportuno. Señala, por ejemplo, que la ciudad más grande en población cercana a los reactores, que es Cáceres, no cuenta con un plan de evacuación en caso de un posible accidente.

Los ecologistas mantienen que desmantelar la central no supondría un problema económico para la zona, puesto que esta desmantelación también generaría puestos de empleo que, junto al auge de las renovables, podría asegurar el desarrollo de la comarca.