14 Julio 2021, 13:18
Actualizado 14 Julio 2021, 14:31

Se cumplen tres semanas desde que la curva de la pandemia comenzó a subir en la región. El 23 de junio, Extremadura alcanzaba los mejores datos de contagios de todo el año con una incidencia de 59 casos por cada 100.000 habitantes.

A partir de ese día, comenzó una escalada primero lenta y después acelerada de positivos hasta superar la barrera de los 250 casos que marca el riesgo extremo por contagios. Hoy esa incidencia se ha multiplicado ya por cinco, hasta los 296 casos por cada 100.000 habitantes.

A pesar de esa preocupante escalada, la Junta ha optado por no aumentar las restricciones generalizadas en sectores como la hostelería o el ocio nocturno. El consejero de Sanidad ha explicado que el avance en la vacunación hace que ahora la variable fundamental para adoptar estas medidas será no tanto el número de personas contagiadas sino la gravedad de esos casos.

La lupa está, por tanto, en la presión hospitalaria. Una presión que ha evolucionado de forma mucho más suave y moderada en estas tres últimas semanas. El 23 de junio había hospitalizados 24 extremeños, tres de ellos en la UCI. Hoy esa cifra ha subido hasta los 27, pero con sólo un enfermo en cuidados intensivos.

 

Cifras que permiten a la región tener la menor ocupación hospitalaria del país. Teniendo en cuenta la población de cada comunidad, en Extremadura hay 2,26 pacientes por cada 100.000 habitantes, cuatro veces menos que la media nacional. Una diferencia mucho mayor en el caso de los cuidados intensivos, donde una región con más de un millón de habitantes tiene un paciente ingresado; en el resto del país esa cifra es 16 veces mayor.