Hoy se reúne el Consejo Interterritorial de Salud, y sobre la mesa tiene la posibilidad de eliminar las mascarillas en hospitales, centros de salud, farmacias y residencias.
Esa medida, en caso de adoptarse, podría aplicarse de forma completa o escalonada. El ministro de Sanidad ha adelantado que se decidirá únicamente en función de lo que opinen los expertos del comité de emergencias sanitarias.
Lo más probable es que la obligación de mascarilla se mantenga en hospitales y centros de salud, pero sí se elimine en farmacias y centros sociosanitarios.
El virólogo José Antonio López, a quien hemos entrevistado, señala que "en farmacias y ópticas es algo que ya no se venía usando, pero en hospitales no vería mal que el uso de mascarilla perdurara".
"El concepto intermedio sería el adecuado", opina López, de forma que "en urgencias permaneciera, y en salas con poca afluencia de público incluso en hospitales podría decaer".
En cuanto a las residencias, él recuerda que los ancianos que viven allí son muy vulnerables, pero al mismo tiempo son "los que más necesitan el cariño y la cercanía de sus seres queridos", por lo que "ahí tengo ideas enfrentadas".
