En nada empieza el movimiento de turistas de cara al puente de la Constitución y la Inmaculada. Entre ellos, los que vienen intercambiando su casa con familias extremeñas. Una nueva modalidad de viajar que se ha disparado en el último año.
Esta práctica, en realidad, lleva ya más de tres décadas funcionando y que, en este 2023, marca un máximo histórico en la región. En total 149 extremeños y extremeñas practican esta modalidad de turismo que, durante este puente, aumentará en un 104% respecto al año anterior.
Es el caso de Mercedes y su hija Antía, que llevan ya tres años intercambiando su casa. Una práctica que les ha llevado hasta puntos muy diversos del país y del mundo y que les ha proporcionado algo más que solo un viaje.
El mismo tiempo lleva Virginia abriendo las puertas de su casa a otros huéspedes, y viceversa. Prácticamente un estilo de vida que ha cambiado y se ha afianzado tras la pandemia y que se hace fuerte en momentos económicos complicados.
Un tipo de turismo que cerró el pasado verano con más de mil pernoctaciones, más de un 20% más que el año pasado y que prevé unos 200 intercambios de cara a Navidad, un aumento de más del 70%.
