La Guardia Civil ha investigado a dos vecinos de Talayuela, de 29 y 48 años, como supuestos autores de un delito de desobediencia grave a la autoridad al incumplir de manera reiterada las medidas de confinamiento establecidas para detener la propagación de la COVID-19.
Entre los dos investigados sumaban 13 denuncias administrativas por hallarse en la vía pública sin una justificación amparada por el estado de alarma, realizadas tanto por agentes de la Policía Local como de la Guardia Civil de la localidad.
La primera actuación se llevó a cabo con un vecino del municipio, de 29 años, después de sumar hasta siete denuncias administrativas, según ha informado la Guardia Civil en una nota.
Varias de las veces en las que los agentes le identificaban en la calle manifestaba su intención de ir a comprar pan, sin embargo, volvía a ser visto más tarde en los extrarradios del municipio junto a otras personas y sin haber realizado compra alguna.
La segunda persona que la Guardia Civil ha investigado ha sido otro vecino del municipio de 48 años que había sido denunciado hasta en seis ocasiones por parte de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad, tras incumplir reiteradamente los motivos amparados por el Real Decreto 463/2020 para hallarse en la vía pública.
Esta persona fue denunciada con anterioridad al ser identificado en la vía pública bebiendo cerveza o deambulando por la calle bajo la excusa de tener que mandar un burofax a una supuesta empresa de trabajo, conociendo los agentes de manera fehaciente que, en la actualidad, no realiza prestación laboral alguna.
Las diligencias policiales correspondientes han sido remitidas al juzgado de primera instancia e instrucción, en funciones de guardia, de Navalmoral de la Mata.