Los ecos del pin parental llegan también a Extremadura. La Junta ha enviado a los colegios una circular, para aclarar que todas las actividades formativas transversales que se organicen en los colegios no deben someterse al consentimiento previo de los padres. Desde la Consejería de Educación nos aseguran que en la región no han recibido ninguna queja por parte de las familias relacionada con este asunto. Y recuerdan que el pin parental no tiene amparo en el ordenamiento jurídico y es incompatible con la autonomía pedagógica de los centros.
Educación no quiere dejar lugar a dudas. En la circular comunica a los directores de los centros que, como marca la Programación General Anual, aprobado por la dirección y evaluado por el Consejo Escolar, las actividades formativas transversales no deben tener consentimiento previo de los padres y madres. Su opinión ya está presente en los Consejos Escolares.
Los defensores del pin parental pretenden que las familias sean las que autoricen o no a sus hijos a realizar actividades complementarias de educación afectivo-sexual, identidad de género, modelos de familia o cualquier otra temática de educación en valores. Hasta el momento la Consejería de Educación no ha recibido ninguna queja por parte de las familias en este sentido