En Extremadura hay 1.696 casos abiertos de violencia de género. 637 de esas mujeres están siendo protegidas por la policía. Lo hacen a diario porque su situación es, son mujeres que viven bajo las amenazas por parte de sus parejas o exparejas. El riesgo se divide en varios tipos según la amenaza que recae sobre ellas.
Las distintas unidades de la policía que trabajan en su protección están conectadas con ellas a través del teléfono. Si en algún momento una de las parejas o ex parejas rompiera una orden de alejamiento pueden avisar a las autoridades para su protección.
La coordinación de todas las instituciones, policiales, judiciales y sociales, es trascendental y todas se vuelcan sobre una víctima en el momento en el que el sistema tiene conocimiento de un caso de violencia de género. Muchas veces a través de la denuncia de la propia mujer, pero no es la única forma ya que en estos casos las instituciones puede actuar de oficio sin que haya de por medio una denuncia de la víctima.
