Las últimas cifras sobre delitos cometidos por menores en nuestra región son extremadamente preocupantes. Lo corrobora el Fiscal Superior de Extremadura, Francisco Javier Montero, quien ha desvelado cifras escalofriantes en el programa informativo de Canal Extremadura TV, 'Ahora Extremadura'.
Montero ha señalado que se ha producido un aumento del 66% de los intentos de homicidio por violencia de género y una subida del 45% en las agresiones sexuales a menores durante 2022. Además, ha alertado, se ha experimentado un crecimiento del 50% en delitos sexuales perpetrados por menores.
El fiscal resaltó la labor de la Fiscalía en la protección de las víctimas, en especial de los menores, considerándolos una "prioridad absoluta del Ministerio Fiscal". Sobre los menores inimputables, aquellos por debajo de los 14 años, Montero ha explicado que, si bien no pueden ser juzgados penalmente, sí hay consecuencias. Los padres, tutores y, en algunos casos, los centros educativos pueden ser considerados responsables civiles.
Dentro de las causas del aumento en delitos sexuales, el fiscal identifica la banalización de las relaciones sexuales, la falta de una educación afectiva y sexual adecuada y el acceso sin restricciones a contenidos pornográficos. Francisco Javier Montero ha expresado la necesidad de educar en "valores de igualdad y de respeto a la libertad de las personas".
Montero también ha valorado lo ocurrido en el caso de los montajes fotográficos de menores en Almendralejo, perpetrados también por menores de edad de la localidad. El fiscal pone el foco en la influencia de la tecnología y en la necesidad de una regulación supranacional en áreas como la inteligencia artificial.
Preocupa también el aumento de delitos de violencia doméstica y de género por menores, con un incremento del 65% con respecto al año anterior. Montero ha señalado que vivimos en una "crisis del principio de autoridad" y una "intolerancia a la frustración" como factores contribuyentes de estos datos.
El Fiscal Superior de Extremadura también ha subrayado la importancia de la transparencia y cercanía de la fiscalía con la sociedad. "No somos una institución oscura", afirma, "queremos estar al servicio de la sociedad, de los ciudadanos y proteger sus derechos fundamentales, especialmente de las víctimas".