La Federación de Asociaciones de Familiares y Personas con Problemas Mentales advierte que no hay relación entre violencia y trastorno mental. De hecho, aseguran que, comparados con la población en general, las personas con trastorno mental son once veces más propensas a ser víctimas de delitos violentos y 140 veces más propensos a robos.
Además, afirman que el 44% ha tenido experiencias de discriminación en sus puestos de trabajo, el 43% en sus relaciones con los amigos y uno de cada tres con sus vecinos y con su propia familia.
Ante estos datos, FEAFES, advierte, que es importante la empatía, la concienciación porque 1 de cada 4 personas tiene, ha tenido o tendrá un problema de salud mental a lo largo de su vida. En este sentido, su presidente, Antonio Lozano, ha defendido que "las personas con trastorno mental grave no son y ni tienen el porqué ser más violentas que el resto de la población. Hay un gran estigma sobre las personas con trastorno mental que ha sido a lo largo de la historia, que han sido tratadas de manera diferente al resto de la población, excluidas, recluidas".
En Extremadura, aproximadamente 40.000 personas presentan un trastorno mental grave. Aunque se han hecho avances significativos en los últimos años, desde FEAFES consideran que la región carece de recursos y medios suficientes para gestionar adecuadamente estos problemas. "Creo que, en ese sentido, la sociedad y la comunidad de Extremadura tienen una gran deuda histórica con las personas con trastorno mental", ha sentenciado Lozano.