Lluís Puyol tiene 40 años, es divulgador de conocimientos sobre inteligencia emocional y dejará su ciudad en Cataluña para vivir en el pequeño pueblo cacereño de Pedroso de Acim. Será gracias a las ayudas de hasta 15.000 euros que promueve la Junta de Extremadura para atraer a los llamados nómadas digitales a nuestra región. Personas que teletrabajan en empresas de cualquier punto del país y que quieren vivir aquí.
Lluís dice que lo hace por dignidad, para no seguir alimentando la especulación inmobiliaria, y porque cree que Extremadura ha sido visionaria al entender que éste es el camino para luchar contra la despoblación.