Los cuatro agentes de la Policía Nacional detenidos en el marco de la Operación 'Minuro-Peces' han abandonado la prisión de Badajoz en un furgón de la Guardia Civil poco antes de las 16.30 horas de este lunes rumbo a Madrid. Ingresarán finalmente en el centro penitenciario de Estremera, han confirmado fuentes de la prisión pacense. Esta mañana la primera opción era que ingresaran en la de Sevilla 1.
La prisión de Estremera es otro de los centros penitenciarios que cuenta con un módulo específico para el ingreso de miembros de los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado, garantizando así su protección frente al resto de presos.
Los cuatro agentes han permanecido en la zona de ingreso de la prisión de Badajoz, donde ingresaron el pasado viernes. Según sus abogados, aseguran que se encuentran bien y más tranquilos tras la presión de los últimos días.
Recursos contra la prisión provisional
La defensa de esos detenidos preparan también un recurso inminente contra el auto que decretó prisión provisional sin fianza para sus clientes. Los letrados alegan indefensión por no conocer las pruebas que sustentan los cargos que se les imputan: delito contra la salud pública, pertenencia a organización criminal y omisión del deber de perseguir el delito.
Por ello, los abogados también solicitarán que se levante el secreto de sumario y puedan ejercer su defensa de manera solvente, un primer paso para que los agentes pudieran salir de prisión hasta la celebración del juicio, como ha ocurrido con otros detenidos.
Al margen de los agentes detenidos, la operación deja también un Guardia Civil de La Garrovilla detenido tras prestar declaración en Torrevieja y otros dos agentes de Policía Nacional de Mérida en libertad provisional. También hay al menos otros cuatro investigados que han quedado en libertad provisional con cargos. A todos se les ha retirado el pasaporte y tienen la obligación de comparecer en el juzgado cada 15 días.
¿Por qué 'Minuro' para nombrar la operación contra los agentes detenidos?