Más de 1.000 menores de entre cinco y doce años participan en los espacios educativos saludables que ha puesto en marcha la Junta de Extremadura. Está dirigido a familias en riesgo de exclusión social. Además de tareas de refuerzo y de ocio, buscan potenciar las habilidades sociales de los niños en 35 municipios distintos.
Todo tipo de actividades
Los pequeños comienzan su jornada realizando tareas de refuerzo educativo. Además, aquí aprenden a gestionar sus emociones y realizan actividades culturales y de ocio. Con especial atención a potenciar sus habilidades sociales. Cristina Gil es técnico de educación infantil y afirma que intentan resolver los conflictos de la mejor forma posible, y hacerles entender que siempre es a través del diálogo. "En eso consiste nuestro día a día", sentencia.
"Tratamos de potenciar el desarrollo y la autonomía y la capacidad de los niños para aplicar lo que aprenden en el campamento a su vida cotidiana". Son palabras de Mercedes Costa, técnico de Cruz Roja. Debido a la pandemia, los pequeños no comen en estos centros, por lo que se ha intentado suplir ese servicio de comedor: les dan una autorización para que los padres vayan al supermercado, quincenalmente, y reciban una cesta de alimentos
Un programa educativo y social que finaliza el próximo 31 de agosto.
