14 Mayo 2020, 13:46
Actualizado 14 Enero 2021, 03:52

La Organización de Consumidores ha realizado un estudio en distintos productos de alimentación para comprobar si en su superficie existe coronavirus, obteniendo un resultado  negativo. Durante la última semana del mes de abril, visitamos 10 supermercados de 8 cadenas de distribución (Alcampo, Carrefour, Condis, Dia, Eroski, Lidl, Mercadona, y Supercor) en 4 ciudades (Madrid, Barcelona, Vitoria y La Coruña). Compramos 66 productos de diferentes marcas de harina, chocolate en tableta, bolsa de patatas fritas, barra de pan, cerveza en lata, manzanas a granel, paquete de yogures, ensalada envasada, tortilla de patatas, carne en barqueta, salmón ahumado, e incluimos papel higiénico.

La muestra responde a productos que han experimentado un incremento de la demanda durante el confinamiento y que se venden utilizando diferentes tipos de envases (cartón, plástico, poliestireno, aluminio, etc.) y con diferentes formas, algunos de difícil limpieza (bolsa de patatas, bolsa de ensalada, barra de pan, etc.). Las compras se realizaron respetando las medidas de precaución que un consumidor debe mantener en el supermercado. Además de mantener una correcta manipulación, cada muestra se introdujo en una bolsa individual para evitar una posible contaminación cruzada.

Se utilizó la técnica PCR

Un laboratorio independiente realizó el análisis empleando la famosa técnica PCR, de la que tanto hemos oído hablar durante estos días; al igual que a las personas, se hizo pasar un hisopo (bastoncillo para recoger muestras) por toda la superficie del envase. Esta técnica se basa en buscar material genético (ARN) específico de este virus (en concreto se buscó una secuencia del genoma que codifica para una proteína de la cubierta del virus); al analizar ARN, aunque el virus se encuentre inactivo por que haya pasado mucho tiempo, la PCR siempre lo va a detectar.

Resultado: 0 positivos de 66 análisis

No se ha detectado material genético de la COVID-19 en ninguna de las muestras del estudio. Evidentemente es solo una foto que hemos querido hacer para tener una idea de la situación de los envases de alimentos. Una foto cuyos resultados nos demuestran que no es tan fácil que el virus acabe en la superficie de un envase para que luego sea capaz de llegar a contagiarnos.

No obstante, debemos seguir manteniendo las mismas medidas de precaución que hemos estado llevando hasta ahora. Está en manos de los consumidores que se acercan a estos establecimientos el garantizar que la superficie de los alimentos se mantenga libre de virus.

El virus no se contagia por ingestión

La Autoridad Europea en Seguridad Alimentaria (EFSA) ha descartado que los alimentos sean vehículo de trasmisión de este tipo de virus. En realidad, se trata de un riesgo emergente de muy reciente aparición y todavía no hay estudios, pero hasta la fecha no se conoce ningún contagio por esta vía, ya que la vía de entrada del virus es por aspiración y no por ingestión.