Las clases comienzan el próximo 10 de septiembre, y lo harán de forma presencial con medidas de higiene para evitar contagios de coronavirus. Una decisión acordada por gobierno y comunidades autónomas que satisface a los más pequeños. Ellos tienen este curso más ganas que otros años de volver a las aulas para reencontrarse con amigos y profesores. La actividad presencial en los centros educativos es esencial para los niños tal y como se ha demostrado durante los meses de confinamiento.
Los más pequeños quieren volver a recibir enseñanzas en sus colegios aunque sabedores de las dificultades a las que se enfrentan este año en plena pandemia de Covid-19. Cuentan con las dificultades para estar en clase con mascarilla y resto de medidas de prevención acordadas, así como el temor a resultar contagiados. Pero les pueden más las ganas de asistir al centro.
Preocupación
Como los más pequeños, los padres se muestran preocupados por la posibilidad de contagio de coronavirus en los centros escolares. Señalan que, sobre todo en los institutos de zonas rurales, acuden alumnos de distintas localidades a los centros y eso dificulta el control de posibles contagios.
También provoca inquietud cómo conciliar en caso de aislamiento de sus hijos para poder seguir trabajando. Este nuevo curso será, sin duda, recordado en la historia de la educación del país.
