Uno de los factores de riesgo del cáncer es el tabaco. Por ello, el Ministerio de Sanidad se ha propuesto implantar un plan antitabaco. Entre las medidas: la subida del precio de la cajetilla para equipararlas a los países europeos.
En España, de media, un paquete de tabaco cuesta cuatro euros y medio frente a los 13 de Irlanda o los 7 de Alemania. La propuesta de Mónica García es un aumento en impuestos con el objetivo de que más fumadores dejen de serlo.
El ministerio señala que el aumento del precio de la cajetilla ya se ha demostrado, en anteriores ocasiones, como una forma efectiva de disuasión. Muchos fumadores podrían plantearse abandonar el hábito si tuvieran que pagar más.
Los estancos ven en la medida una cuestión más recaudatoria que sanitaria, y creen que los clientes que podrían perder buscarían otro tipo de fórmulas para seguir fumando, ahorrándose unos euros.
La misma percepción tienen los productores de la región. Esperan que el cultivo pueda seguir siendo viable, pero que también la subida de impuestos repercuta en la actividad a la hora de recibir ayudas.
La propuesta de Sanidad, además de equiparar los precios con los de los países de nuestro entorno, pasaría por prohibir fumar en las terrazas y en los coches donde viajen menores y embarazadas, así como regular el uso de vapeadores.