¿Han utilizado alguna vez aplicaciones de citas? En un mundo cada vez más online, estas herramientas ya son prácticamente cotidianas. Pero esconden un perfil peligroso, según este estudio: refuerzan los estereotipos de género tradicionales.
"Por un lado se nos piden que seamos femeninas en el sentido más tradicional: cuidadosas, cariñosas, recatadas, princesas... Pero por otro lado, no sólo en Tinder sino en todas las redes sociales, a las mujeres se nos está pornificando, se nos están sexualizando", asegura Mónica Saiz, coordinadora del estudio «Apps Sin Violencia Sexual».
El 22% de las 363 mujeres heterosexuales de entre 18 y 35 años usuarias de Tinder que han sido encuestadas afirman haber sido violadas. Y casi 58% de las preguntadas reconocen haberse sentido presionadas para mantener relaciones sexuales.
El abuso, cada vez más temprano, de la pornografía contribuye a normalizar, e incluso erotizar, violencias de las que muchas veces ni las mismas mujeres con conscientes. "¿Quisiste parar y él te presionó para seguir?, ¿se quitó el preservativo sin tu consentimiento en medio de la relación?, ¿te agredió, te dio bofetadas, ahogamientos sin haberlo pactado previamente? Es decir, hay una serie de categorías de violencia sexual planteadas a las que ha respondido que sí ese 82% que en principio te ha dicho que no", nos explica Saiz.
Además, el 27,7% de las mujeres que tuvieron relaciones afirman que los hombres fueron violentos durante el sexo, realizándoles ahogamientos, abofeteándolas o insultándolas. Y el 28,2% dijeron haber vivido alguna práctica que les hacía daño y en la que, a pesar de la negativa, el hombre siguió.
Datos por los que la Federación de Mujeres Jóvenes han expresado su profunda preocupación y exigen políticas de prevención. Datos alarmantes, más aún cuando las aplicaciones de citas se han convertido en un forma habitual de búsqueda de relaciones afectivas para los jóvenes.