La pandemia trajo una digitalización acelerada de la administración evitando las largas colas e instaurando la cita. Pero lo cierto es que a día de hoy los usuarios ya no lo consideran tan necesario. Si no controlas el certificado digital o el sistema clave, solicitar cita previa se convierte casi en tarea imposible.
Según un estudio de la Organización de Consumidores y Usuarios, una de cada tres peticiones no se resuelven. Bien porque no hay huecos disponibles, o bien porque te dan la cita en otra ciudad a kilómetros de distancia.
La media de espera supera los siete días. Pero hay oficinas en las que se tarda más de un mes. La solicitud de la pensión de jubilación o el cambio de la titularidad de los vehículos son los trámites que se llevan la palma. Desde la OCU piden mejoras en la web donde se obtienen las citas para que no se convierta en una barreras más que una ventaja.