Con el calor, las piscinas se convierten en un refugio ideal, pero estas altas temperaturas también son propicias para el aumento de la prevalencia del Virus del Nilo Occidental, que se transmite a través de las picaduras de mosquitos. Aunque en Extremadura no se han registrado contagios hasta el momento, el Servicio Extremeño de Salud ha intensificado los cribados para prevenir posibles brotes.
Virus del Nilo en otras regiones
La situación es diferente en Andalucía, donde un brote del virus ha afectado a varios municipios de las marismas del Guadalquivir. Hasta el momento, se han registrado nueve personas hospitalizadas y dos mujeres de edad avanzada han fallecido debido a complicaciones asociadas al virus. En Extremadura, las autoridades sanitarias mantienen una vigilancia estrecha, pero hasta ahora no se ha detectado ningún caso.
El Virus del Nilo Occidental suele ser asintomático en el 80% de los casos. Sin embargo, cuando se manifiesta, generalmente lo hace con síntomas leves, como fiebre. Los casos más graves, que pueden ser mortales, suelen presentarse en niños, personas mayores y aquellos con sistemas inmunitarios debilitados. Según los epidemiólogos, uno de cada 150 contagios podría acabar en fallecimiento
Cribados
El SES realiza cribados entre donantes de sangre para detectar posibles casos, ya que el virus es transmitido a los humanos cuando los mosquitos pican a aves infectadas. En Extremadura, zonas como las Vegas del Guadiana, los regadíos de Campo Arañuelo y el Alagón son áreas potenciales para la propagación del virus. Se recomienda evitar los humedales al amanecer o al anochecer, y se subraya la importancia de la fumigación como principal medida preventiva.