Dicen de nuestra región que es extrema y dura, y buena parte de esa descripción popular se puede aplicar también en días como hoy, con 30 fallecidos nuevos con coronavirus en las últimas 24 horas. Dura, porque hay 258 muertes. Extrema, porque en el lado opuesto hoy ha sido el día con más pacientes curados desde que comenzara la crisis sanitaria, 59 desde ayer y 282 en total.
Que los extremeños superemos esta crisis es algo intrínseco en nuestras vidas, porque estamos acostumbrados a salir adelante con más o menos ayuda, con más o menos prejuicios.
Es un mensaje que nos recuerdan desde el Colegio Marista de Navalmoral de la Mata, cuyos profesores han compartido un vídeo con sus alumnos para recordarles que hay muchas ganas de seguir viviendo.
Y lo haremos sin olvidar quiénes somos, cuál es nuestra tierra, sintiéndonos orgullosos de nuestras raíces, tal y como refleja el homenaje al castúo que han realizado desde el Colegio Sopeña de Badajoz.
“Sepa usté, forasteru, que sabemus mu requetebién leé y escribí lus extremeñus. Pa eso, cuandu eramus zagalinas, un maestro mu resabio y mu letrau nus enseñó en la escuela. Y pa encandilá lus nuestrus pensares no nus jacen falta ni las eses ni las jerres. Y ya, pa terminá, si tiene una miajina de vagá, aviente usté una ojeá por lus librus de Luis Chamizo o de Gabriel y Galán, a ve si encuentra usté, señó mío, arguna incurtura en su pluma desgarrá”.
Es parte del poema de María José Pomberó titulado “Sepa usté, forasteru”, recitado por Álvaro, Lucía y César, alumnos de ese colegio pacense.
Volverán las celebraciones, las clases llenas de alumnos y docentes, volverán los abrazos, y las ganas de disfrutar la vida como lo hacíamos antes. Volverá a juntarse la banda municipal de Don Benito, que estos días de confinamiento consigue que la música no deje de sonar en tiempos de cuarentena gracias al empeño de sus componentes.
Y aunque no sabemos cuándo volveremos a ganar otra vez el festival de Eurovisión, como pasó hace 52 años con Massiel en Reino Unido, tenemos claro algo. Somos extremeños, no nos faltarán las ganas de luchar.