El reactor uno de la central nuclear de Almaraz entró en servicio comercial el 1 de septiembre de 1983. Un año más tarde, en julio, arrancaría el trabajo en la unidad dos. Lleva 37 años en funcionamiento y generando anualmente unos 16.000 millones de kilowatios a través de la fusión de uranio ligeramente enriquecido.
"La primera prórroga fue una magnífica noticia para Extremadura y para todo el país."
En junio de 2010, la central recibió su primera prórroga de explotación y en palabras del director en aquel entonces José María Bernaldo de Quirós "fue una magnífica noticia para Extremadura y para todo el país." Al parecer tanto, que tres años más tarde, los tres socios de la central confirmaron que estaban preparados para solicitar una nueva extensión, tal y como anunció Bernaldo de Quirós "serán 20 o 30 o lo que sean, pero desde luego vamos a solicitarla."
Polémica con la última solicitud de prórroga
En 2013, la licencia estaba fijada hasta el 8 de junio de 2020 y los socios (Iberdrola, Naturgy y Endesa) parecían llevarse bien o quizás mejor que en los últimos tiempos, porque recordemos, uno de ellos, Endesa, se opuso en un primer momento a solicitar la última prórroga.
El acuerdo llegó en marzo de 2019, a nueve días de expirar el plazo de presentación de la documentación. Una información que recibió el visto bueno del Consejo de Seguridad Nacional en mayo de este año y que finalmente, ahora ha recibido el aprobado definitivo del Gobierno.
La central nuclear de Almaraz cerrará finalmente en octubre de 2028. Un año antes dejará de funcionar el reactor uno al alcanzar los 44 años de vida.
Almaraz recibe la autorización para seguir funcionando hasta 2028
