Febrero tiene la fama de loco por sus drásticos cambios de tiempo de un día para otro. La causa reside en que es un mes de transición entre el invierno y el verano. Nosotros, al encontrarnos en latitudes medias, nos pilla de lleno el trasiego de las distintas masas de aire que nos acompañarán en durante semanas. Algo similar al comportamiento de octubre.
De ahí, dos refranes que lo resumen a la perfección: “En febrero, el Loco, ningún día se parece a otro” y “Febrero, el Orate, cada día un disparate”. Pero… ¿se tiene ganada esta fama? Pues si tiramos de archivo comprobamos que, lamentablemente, sí.
En su locura, febrero hace que saquemos abrigos, gorros y bufandas. Como ocurrió a principios de los años 80 con varias olas de frío que nos dejaron los récords, por ahora, imbatibles. En Badajoz el mercurio cayó hasta los -6,6ºC en 1981 y en Cáceres, hasta los -5,6. Esto, en la red principal. Pero en la secundaria encontramos los -10ºC de Berzocana, de Toril y de Villafranca de los Barros y los -8 de Zafra en 2012.
Pero podemos pasar a la manga corta en sólo unos días. La primavera suele enseñar ya la patita y en los registros encontramos valores de hasta 29ºC en Badajoz y 25 en Cáceres en 1960.
La lluvia también presenta un carácter dispar. En su enajenación febrero puede estar lloviendo prácticamente todos sus días como ocurrió en Cáceres en 1947 con 25 días de lluvia y en Badajoz en 1968, con 24. Y con totales de lluvia más propios equiparables a los de todo un trimestre. Esto ocurrió en 2010 con acumulados de 167L/m2 en Badajoz y de 162 en Cáceres. Vamos, que ya lo dice el refrán: Febrero mes loco, unas veces por mucho, otras por poco
En el lado opuesto, tenemos el febrero de 2012 donde no llovió nada en Badajoz y el de 1961 donde no llovió nada en Cáceres.
La nieve, que es tan rara aquí en Extremadura como él, también nos ha visitado en este mes como ocurrió en 2013, que afectó a la Campiña Sur, de más de 20cm de espesor. Provocó cortes de luz en Llerena y en Azuaga y cerró varias carreteras del sur de Badajoz.
Y, cómo no, febrero también tiene sus ventoleras. Recordemos el temporal de viento de más de 140km/h del año 1969, con rachas de más de 140km/h. Rematamos este repaso recordando el tornado que se registró en Jerez de los Caballeros en 2010 y que arrasó más de 2400 encinas y alcornoques.
Pero… ¿a qué es debido? Febrero, así como marzo, es un mes de transición entre el invierno y el largo verano. En estas semanas es frecuente que la lucha entre distintas masas de aire nos deje episodios tan disparatado como los que hemos vistos.
Esperemos que todo quede aquí… ¿o no? Yo no lo tengo muy claro: "Febrero loco y marzo, otro poco"