Suben los datos del paro en Extremadura. La región cuenta este mes de noviembre con 1.737 desempleados más que en octubre. Es un incremento del 1,5 %. Con estas cifras, la región tiene ya a 110.825 personas que buscan trabajo pero no lo encuentran. Si echamos la vista atrás un año, el desempleo ha crecido en más de 8.600 personas.
La peor parte se la lleva el sector servicios, con 1.270 desempleados más, seguido de construcción y de la industria. Trae también peores datos para las mujeres, 1.162 más en situación de desempleo frente a 575 hombres.
Desempleo de larga duración
La mayor subida se produce en los parados de larga duración hasta los 2.542. Por tramos de edad, en el último mes más de 600 personas mayores de 45 años se quedaron en paro. Es una edad difícil para encontrar empleo. Según los datos de la última Encuesta de Población Activa, en Extremadura hay casi 39 mil mayores de 45 que buscan un trabajo. Su edad, y las competencias digitales, imprescindibles en cualquier trabajo hoy día, son algunas de su principales dificultades para conseguirlo.
Nos lo ha contado varias personas en esa situación, como Miguel Lopez, de 54 años. Toda su vida trabajó como pintor y chapista, pero la última crisis le dejó sin trabajo y no ha sido capaz de retomar. Nos cuenta que sobre todo le rechazan porque las empresas prefieren a gente joven. Además cuida a su madre, algo que le hace más complicado poder acceder a determinados empleos. Ahora mismo se mantienen los dos con su paga de viudedad. Él no tiene ningún ingreso porque le faltan dos meses de cotización para cobrar el subsidio para personas mayores de 50 años. Son 430 euros que sí tiene reconocidos Diego Bordón, de 59 años.
Diego nos habla de estar ante una "pandemia encubierta" y con el ánimo mermado, expresa: "No quiero subsidios, dame 700 euros y ponme a limpiar arroyos". Asumir esto es duro, "te vas haciendo a la idea de que no vales para nada, de que eres un desahuciado de la sociedad..."
Competencias digitales
Diego resta esa sensación ayudando a otras personas en su misma situación. Busca trabajo en todas partes. También lo ha intentado en aquello a lo que dedicó la vida entera como comercial de productos de ferretería pero su gremio, como casi todos ha cambiado mucho, y frente a la experiencia, se valoran más competencias digitales.
Nos lo confirma Carmen Dasilva, técnico de Plan de Competencias digitales para la empleabilidad de Extremadura: "Hoy en día, en cualquier trabajo hay dispositivos electrónicos y es importante saber manejarlos o demostrar que no se tiene miedo a aprender a utilizarlos".
En ese sentido la edad, según nos cuenta Carmen, puede ser una barrera pero no por una cuestión de capacidades sino sobre todo por el miedo a lo desconocido. Un miedo que desmonta María Piedad Clemente, una de sus usuarias que tras quedarse en paro supo que estaba totalmente desactualizada tecnológicamente y que necesitaba reciclarse para poder incorporarse al mercado laboral. La formación que recibió en los Nuevos Centros del Conocimiento le fue de gran utilidad para entrar de nuevo en el engranaje laboral. De hecho ha encontrado trabajo en una inmobiliaria justamente para desarrollar una tarea para la que eran necesarias las competencias digitales. Esas que no garantizan un empleo, pero que evita que se cierren puertas.
