Grabasa comenzó a tener problemas en 2008 y entró en concurso de acreedores en 2011, cuando dejó de tener actividad. En ella trabajaron hasta 80 empleados de Burguillos y alrededores. Hubo varios intentos de compra pero no fue hasta 2019 cuando salió adelante su adquisición por parte del empresario alemán Markus Balke.
El alcalde de la localidad, Manuel Lima, considera que con el cierre del concurso se cierra una época, pero se abre otra más esperanzadora: "Ya ha quedado todo cerrado, incluso los trabajadores han cobrado parte de una deuda que estaba ahí. Grabasa ya es historia, y ahora comienza la historia a formalizarse con Piedras, Canteras y Producciones S.L."
Nueva empresa
La nueva empresa tenía previsto comenzar su actividad a principios de este año, pero la pandemia ha retrasado sus planes. Sin embargo, una de las canteras ya está a punto de abrirse. Una empresa de Alicante pone la maquinaria y Burguillo los trabajadores: "Se están llevando maquinarias a la cantera y demás, y lo harán con trabajadores de Burguillos", adelantaba el alcalde.
Además de la habitual extracción y fabricación de tableros y piedras a medida, la nueva empresa tiene previsto desarrollar nuevos productos para otros sectores. Se espera que la actividad se reanude de manera inminente.
