Daniel Sánchez Lopistao tiene 23 años. Es originario de Don Benito, aunque está afincado en Medellín. Con 18 años se marchó a Londres a formarse en el mundo del vino. "Me jugué el todo o nada por el mundo del vino. Y he acertado", ha dicho en una entrevista en Canal Extremadura.
Hasta hace unos meses ha estado trabajando en el restaurante 'Ambivium' de Peñafiel, en Castilla y León. Reconoce que le ha dado mucha pena, pero ahora está centrado en "hacer carrera en Extremadura" y en el campeonato nacional de sumilleres que se celebrará la próxima semana en el Salón Gurmet de Madrid. "Estoy nervioso por el campeonato nacional porque afronto una cita muy importante. Aunque sé que este año va a ser aprender de los demás".
Daniel Sánchez ha explicado en la entrevista que un sumiller no se encarga solo del vino o los licores de un restaurante, sino que engloba toda la comida o cena. Su objetivo es que el comensal disfrute del vino con cada plato que se sirva.
Por último, preguntado por qué vino recomendaría para alegrar una época tan convulsa como la que vivimos, el sumiller extremeño ha elegido un caldo de Viña Puebla, por su calidad, ha dicho.
