Importante descubrimiento en la iglesia de Santiago de Llerena. En este templo han aparecido unas impresionantes pinturas y frescos pertenecientes a los siglos XV y XVI.
El hallazgo de estas pinturas, según cuenta el cronista oficial de Llerena, Luis Garraín, resuelve un enigma que se remonta a quince años atrás, cuando se iniciaron las primeras investigaciones en el templo. Garraín asegura que estos frescos han sido catalogados de gran importancia por expertos en arte y restauradores.
Una de las particularidades más relevantes de estas pinturas es el uso de la técnica del pan de oro. Un método, señala Garraín, que refleja el poderío económico de la época en la localidad de la Campiña Sur. Un detalle que, añade, revela, además, la importancia que tenía la familia que mandó construir el templo, siendo una de las más influyentes de aquella etapa. "La familia que edificó este templo era de las más importantes que había en Extremadura en aquella época", afirma el cronista llerenense.
La familia en cuestión era la de don Alonso de Cárdenas, último maestre de la Orden de Santiago. La edificación del templo se hizo, en una primera fase, para su propio enterramiento. El resto de la iglesia fue mandada a construir por su hija, doña Juana de Cárdenas, y su nieto, también llamado Alonso de Cárdenas, que fue el primer conde de la Puebla del Maestre.
El proyecto de restauración no ha finalizado y continuarán los trabajos para poder desvelar nuevos secretos bajo las capas de pintura que cubren los muros de la iglesia de Santiago. "Limpiarlo todo sería ideal, lograríamos aquí uno de los mayores tesoros del arte de finales del XV y del XVI en Extremadura" ha reconocido el cronista llerenense, Luis Garraín.