La campaña de tomate se iniciará en la última semana de julio y se extenderá hasta primeros del mes de octubre, en la que se transportarán más de 2 millones de toneladas de este producto por las carreteras de la comunidad autónoma de Extremadura, lo que va a suponer que se realicen más de 100.000 desplazamientos entre las explotaciones agrarias y las empresas transformadoras y en torno a 1.500 diarios.
El delegado del Gobierno en Extremadura, José Luis Quintana, ha presidido este jueves una reunión en la que se ha abordado con todos los sectores implicados la próxima campaña de transporte del tomate por carretera, y que se ha centrado en analizar el cumplimiento de la normativa que regula el transporte de mercancías por carretera y, específicamente, en uno de sus apartados, el transporte del tomate, ante lo que establece unas condiciones específicas para garantizar la seguridad viaria y evitar posibles accidentes de tráfico.
En declaraciones a los medios, Quintana ha concretado que la campaña se iniciará en la última semana de julio aunque "lo normal" es que se retrase y sea a primeros de agosto cuando comience y pueda darse una "acumulación" en cuanto a la producción de tomate, y que, durante los próximos meses, se espera transportar por las carreteras de Extremadura más de 2 millones de toneladas de tomate.
En relación al pasado año y en datos globales, ha precisado, durante la campaña del año pasado se controlaron 1.674 vehículos, lo que ha supuesto un 24 por ciento más que los controlados en la campaña anterior; mientras que el incremento de las denuncias se situado en un 11 por ciento; por lo que el porcentaje de vehículos denunciados se redujo del 31,9 por ciento al 26,8 por ciento.
DENUNCIAS MÁS FRECUENTES Las denuncias más frecuentes continúan siendo las relacionadas con el exceso de peso y la disposición de la carga.
También han sido significativas las denuncias cursadas por el estado de los neumáticos y por el vertido de líquido a la calzada.
A pesar de estos datos, se ha mejorado significativamente en otro tipo de denuncias relacionadas con el estado de los vehículos, lo que indica que los responsables del transporte han mejorado "considerablemente" la utilización de vehículos adecuados para este transporte.
En cuanto a las incidencias viarias ocasionadas por la pérdida de líquido o de producto sobre las vías, el número total de las mismas se incrementó de manera significativa, pasando de 46 incidencias en 2022 a 76 en 2023, lo que supone una subida del 65 por ciento, con lo que se rompe así la tendencia a la baja detectada en la campaña de 2022.
Asimismo, cinco vehículos fueron inmovilizados por incumplir las condiciones adecuadas para el transporte y se contabilizaron cuatro accidentes relacionados con la campaña.
En este apartado, la DGT recomienda mucha prudencia y precaución en la carretera para evitar posibles accidentes y el Sector de Tráfico de la Guardia Civil ha recordado la obligatoriedad del cumplimiento de las normas en el transporte del tomate.
El delegado del Gobierno ha destacado en este sentido la importancia de la colocación de la carga y el buen estado de los neumáticos.
En cualquier caso, desde la Delegación se ha puesto en valor la concienciación positiva apreciada en los últimos años entre productores y transportistas en lo que se refiere a la adopción de medidas para mejorar la seguridad de estos transportes.
"Creemos que avanzamos año tras año y, con estas reuniones, corregimos las deficiencias apreciadas para evitar mayores riesgos y tener una campaña lo más segura posible", ha incidido José Luis Quintana.
Respecto a los participantes en la reunión, entre ellos representantes del sector del tomate o transportistas, el delegado del Gobierno ha precisado que la reclamación principal realizada no corresponde a la Administración General del Estado como es la situación en la que se encuentran los caminos por los que se trasladan los vehículos hasta las carreteras y que van a trasladárselo a la Junta de Extremadura o, en algún caso, a algún ayuntamiento para que los arreglen.
Así, les han pedido las prioridades sobre esos caminos para trasladarlo a las administraciones correspondientes y que hagan un "esfuerzo" porque el sector del tomate es "muy importante" para la región, en el marco de una campaña que va a suponer que se realicen más de 100.000 desplazamientos entre las explotaciones agrarias y las empresas transformadoras, ante lo que es necesario establecer un control sobre los vehículos que realizan este transporte para evitar que la pérdida de la carga o el derrame de líquido puedan ocasionar incidentes en el tráfico.
Por otro lado y preguntado por la petición de UPA-UCE Extremadura de que no se intensifiquen las inspecciones durante los picos de recolección del tomate, Quintana ha abundado en que gracias a esas inspecciones se han registrado cuatro accidentes aunque "sin mayor importancia" el pasado año, y en que si no se realizan controles "vamos a pagar las consecuencias todos", y tienen que hacer incidencia en el exceso de peso y en el vertido de líquido o tomate, especialmente en rotondas o en carreteras, de cara a evitar posibles accidentes.
UPA-UCE Por su parte, UPA-UCE Extremadura ha reclamado que no se intensifiquen las inspecciones en el transporte del tomate por carretera durante los picos de producción que se puedan dar en esta campaña, que comenzará con retraso, con el fin de no obstaculizar la recogida, como así lo ha trasladado su secretario general, Ignacio Huertas, durante la reunión mantenida este jueves entre el conjunto del sector y la Delegación del Gobierno.
Esta organización agraria ha destacado que los agricultores hacen cada año un importante esfuerzo económico para la mejora del transporte del tomate durante la campaña y "así seguirán haciéndolo", según indica en nota de prensa.
Durante dicho encuentro, se ha puesto de manifiesto que los datos mejoran cada año y que la situación ha evolucionado "mucho" en seguridad en los últimos 15 años.
"El año pasado se produjeron cuatro accidentes durante toda la campaña, algo que pone de manifiesto que se están haciendo las cosas bien, con el riesgo añadido que supone tener que transportar muchas toneladas de tomate en menos de dos meses", ha mantenido Huertas.
UPA-UCE ha señalado que para esta campaña de tomate se espera una producción de 2,2 millones de toneladas, una cantidad mucho mayor que el año pasado, lo que conllevará más transportes y, por tanto, también más incidencias.
Desde el sector productor, se ha puesto de manifiesto el estado "lamentable" en el que se encuentran algunos caminos, provocando el deterioro de las ruedas de los camiones y aumentando el riesgo de problemas y sanciones para los transportistas.
Por ello, el sector ha reclamado a la Junta de Extremadura que haga un esfuerzo para mejorar el estado de los caminos y también la seguridad en el transporte en las zonas con mayor deterioro de los caminos.
"Pedimos disculpas de antemano al conjunto de la ciudadanía porque hay que trasladar más de 2.200.000 toneladas en poco tiempo, pero se trata de un sector fundamental para la riqueza y empleo extremeño, así que se harán los trabajos con las mayores condiciones de seguridad posible sabiendo que el riesgo cero no existe", ha concluido Huertas.