Ya habían advertido, los vecinos, varias veces del peligro de un pozo en un terreno municipal de Rincón de Ballesteros, en la provincia de Cáceres. La muerte de un caballo al caer hoy en su interior lo ha reavivado.
Algo así se veía venir, dice el propietario de la finca y el caballo muerto, de nombre Fandango. Asegura que esta situación se prolonga durante varios años, el tiempo que llevan reclamando que se acometa la obra prevista para sustituir este pozo de decantación por una depuradora.
Fue durante la mañana de este sábado, cuando el dueño se percató de lo sucedido, al venir a echar de comer al animal, que llevaba más de una década con ellos. Ahora se pregunta a quién tiene que reclamar daños y perjuicios por lo sucedido.
Desde el Ayuntamiento lamentan lo sucedido. Afirman que todos los permisos municipales ya están concedidos y se comprometen a aligerar los trámites para que los trabajos, que debe realizan la Diputación Provincial de Cáceres, arranquen cuanto antes.
Mientras el caballo será retirado por el Seprona el lunes. Y el Canal de Isabel II ha procedido esta tarde a vallar la zona para prevenir nuevos incidentes.