Cada Navidad parece una carrera entre pueblos y ciudades por ver quién enciende antes el alumbrado. Sin embargo, en nuestra región hay pueblos como Cabezuela del Valle que son la excepción a esa norma. Aquí ni si quiera han terminado de instalar la decoración navideña y tendrán que esperar a este sábado para ver sus calles iluminadas. En Piornal los adornos se han iluminado esta misma semana pero su tradicional abeto aún permanece apagado. Los vecinos creen que podría deberse a una decisión para potenciar el ahorro energético aunque, no en vano, aseguran que las luces son un reclamo para atraer turistas.
Con mucha antelación o justo a tiempo, lo cierto e s que nunca es tarde para rendirse a la magia de la Navidad.