Ocho poblaciones extremeñas siguen evacuadas por riesgo de incendio. De ellas, siete en Las Hurdes: el municipio de Ladrillar y seis alquerías (Cabezo, Riomalo de Arriba, Aceitunilla, Batuequilla, La Horcajada y Las Mestas).
La otra localidad desalojada es Casas de Miravete, cuyos vecinos tuvieron que abandonar sus casas la noche del jueves al viernes, para ser desplazados hasta Almaraz, donde permanecerán hasta que puedan regresar a sus hogares.
Salieron con lo imprescindible y son unas cien personas las que llegaron a Almaraz. No todas las que estaban en el pueblo, porque hubo quien no esperó y están en casas de familiares o en hoteles de la zona. Pero para todos, las ganas de volver y la incertidumbre se mezclan con la impotencia y la pena.
Además, dos personas dependientes y sus familias han sido ubicadas en una residencia geriátrica también de Almaraz, donde se han volcado para hacer más llevadera esta salida forzosa de sus vecinos de Casas de Miravete.
