La idea de que se puedan producir diamantes en una fábrica es un poco extraña. Vamos a conocer mejor este proceso y sus posibles aplicaciones:
¿Qué es un diamante y cómo se forma?
El diamante es un mineral formado por carbono. Normalmente, en la naturaleza el carbono puro suele encontrarse en forma de grafito, el mismo que encontramos en la punta de los lápices. Cuando ese grafito se somete a las presiones y temperaturas propias del interior de la corteza terrestre durante millones de años se transforma en diamante, que es el material más duro y con la conductividad términca más alta que se conoce. Desde los años 50 se ha empezado a producir de forma artificial, especialmente para usos industriales.
¿Cómo se va a fabricar en Trujillo?
Hay varias formas de fabricarlo, la que usa Diamond Foundry es la Deposición Química de Vapor. En una cámara que está a temperaturas mayores que las de la superfie del sol, un reactor de plasma, se coloca una oblea sobre la que irán precipitando, capa a capa, los átomos de carbono procedentes de un gas (normalmente metano) que se va inyectando durante el proceso. De esta forma, la oblea crece mediante la deposición de esos átomos que se organizan con la estructura deseada. Con este método se crean diamantes más perfectos que los produce la naturaleza. En el caso de Trujillo los reactores de plasma se alimentarán mediante una planta fotovoltaica con lo que se reducirá el impacto ecológico de su producción.
¿Y para qué se van a emplear?
Hasta el momento Diamond Foundry ha estado produciendo diamantes para joyería en sus fábricas de Estadus Unidos, pero en la planta de Trujillo quieren hacer algo más innovador: producir diamantes que se ensamblen en los microprocesadores para disipar su calor. Las altas temperaturas limitan el rendimiento de los chips, pero con una capa de diamante podrán operar más rápido y con un menor consumo energético. Esta nueva generación de microprocesadores de altas prestaciones se usurán en las industrias más exigentes, como la aeropespacial, las redes 5G y 6 G o en los coches eléctricos. Sin embargo, se trata de una tecnología tan innovadora que todavía no se emplea en la industria de los procesadores porque hasta el momento no ha habido nadie capaz de suministrar un material con las características del que se producirá en Extremadura.
Publicada la declaración ambiental favorable para la fábrica de diamantes en Trujillo