Agricultores de toda España, convocados por las organizaciones agrarias Asaja, COAG y UPA, se han concentrado este miércoles frente al Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación para exigir compensaciones por lo que consideran un "grave perjuicio" provocado por los acuerdos comerciales internacionales y las decisiones políticas que, aseguran, están poniendo en jaque la viabilidad del sector cerealista.
Durante la movilización, los representantes agrarios han denunciado que el campo "no tiene futuro" si no se adoptan medidas urgentes que garanticen precios justos y rentabilidad para las explotaciones.
“Los números no salen”
El presidente nacional de Asaja, Pedro Barato, ha afirmado que los altos costes de producción y los precios bajos del grano están haciendo inviable el cultivo de cereal. Según ha señalado, el precio de venta se sitúa por debajo de los 200 euros por tonelada, mientras que los fertilizantes han llegado a costar entre 600 y 700 euros la tonelada si incluyen componentes complejos.
Por su parte, el secretario de Agricultura de UPA, Ignacio Huertas, ha calificado de "crítica" la situación del cerealista, que sufre "precios ruinosos y costes de producción disparados", a pesar de haber tenido una buena cosecha. Huertas ha exigido al Gobierno español y a la UE que revisen los acuerdos de libre comercio con Ucrania, reclamando que se establezcan contingentes a las importaciones de cereal ucraniano.
Desde COAG, su responsable de Cereales, Javier Fatás, ha advertido que esta campaña traerá pérdidas de 50 euros por tonelada cosechada, una situación insostenible que ya venían denunciando desde hace meses. “Los tratados comerciales, la guerra de Ucrania y los movimientos geopolíticos los están pagando los agricultores españoles, y en especial los cerealistas”, ha denunciado.