Los medios destacaron hace muchos años la aventura de nueve extremeños. Corría el verano de 1980 cuando montañeros de Cáceres y de Badajoz se unieron en la primera expedición polar de la región. Recorrieron cinco mil kilómetros atravesando Europa hasta la isla noruega de Spitzberg. Se embarcaron entonces en la aventura sin ser muy conscientes aún de que lograrían un hito para el alpinismo extremeño.
Cuarenta y dos años después, otro extremeño ha querido seguir sus pasos, y junto a dos vascos ha querido rendir homenaje a aquella primera expedición. José Trejo atiende a Canal Extremadura nos atiende de Noruega. Acaba de terminar la expedición por ese mismo archipiélago en el que en 1980 ondeó la bandera extremeña y, 32 años después, ha vuelto la verde blanca y negra ha vuelto a ondear en el polo norte.
José conoció por primera vez esa historia, y hace poco le surgió la oportunidad de repertirla siguiendo su inspiración. Y lo ha hecho nada más y nada menos que con dos de los antiguos paisanos expedicionarios. Juntos han vivido 21 días de travesía en condiciones muy extremas, con hasta 30 grados bajo cero y 300 kilómetros a pie tirando de un trineo.
José tiene claro su mejor recuerdo, "el compañerismo y la camadería entre tres personas que apenas nos conocíamos"; lo peor, el acecho de los osos, muy peligrosos en esa zona y más aún en días de baaj visibilidad.
Y pasada esta gran aventura, José ya piensa en la siguiente. Entre las zonas barajadas, el norte de Groenlandia, Alaska o la Antártida. Sea donde sea, el ánimo será el mismo: "seguir avanzando y buscando historias para repatirlas, emularlas o contarlas".
El extremeño José Trejo culmina con éxito su travesía polar
