La Junta de Extremadura y la Diputación Provincial de Cáceres han mantenido este miércoles una reunión para coordinar medidas preventivas frente a posibles problemas en el suministro de agua potable en los municipios afectados por los incendios forestales del verano. La preocupación principal es la llegada de las primeras lluvias, que podrían arrastrar cenizas hacia las captaciones de agua y comprometer su calidad.
El consumo de agua preocupa en 17 municipios cacereños afectados por los incendios. El domingo se esperan las primeras lluvias. Y eso puede provocar el arrastre de las cenizas y que volvamos a ver bajar las aguas negras como en 2023. O a los vecinos intentando retirarla con palas como en Garganta la Olla en 2019. Con la gran cantidad de terreno quemado, los expertos en la naturaleza creen que va a ser difícil de evitar.
"Toda la contaminación del material quemado va a acabar en los ríos, en los arroyos, en las gargantas, en los embalses... si no se... y creo que por el tamaño de las zonas afectadas va a ser casi imposible establecer las medidas adecuadas para evitarlo" señala Marcelino Cardalliaguet, representante de SEO/BirdLife en la Comunidad Autónoma de Extremadura.
La Junta y la Diputación de Cáceres trabajan para tratar de prevenirlo. Han hecho un mapeo de la afectación del incendio sobre las captaciones de agua y ya hay técnicos sobre el terreno.
"Establecer unas medidas que ya anunció la presidenta Guardiola sobre la zona quemada y sobre los cauces para evitar ese arrastre. Eso lo hacen los forestales. Pero también tenemos que estar preparados por si acaso ese arrastre de cenizas se produce", afirma la consejera de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Sostenible de la Junta de Extremadura, Mercedes Morán.
Piden a los ayuntamientos afectados estar atentos a las condiciones meteorológicas para actuar a tiempo en caso de lluvia. "Cerrar cualquier captación de agua que vaya a la red pública o que vaya a la depuración, porque una vez que se mete dentro de la red pública de agua es muy difícil afrontar el tema" señala el presidente de la Diputación de Cáceres, Miguel Ángel Morales.
Y lanzan un mensaje de tranquilidad: Se van a hacer análisis constantes de agua para asegurar su potabilidad y en caso necesario desplegarán camiones cisterna para abastecer a la población.