Tras el esperado anuncio de la llegada de la gigafactoría, ahora toca hacer números. La zona de Campo Arañuelo ve con optimismo la llegada de la industria china. Más, si cabe, cuando el cierre de Almaraz parece próximo.
Municipios como Casatejada o Saucedilla, que se encuentran en el área de influencia de Almaraz, van a ser los grandes beneficiados. Algunos de sus vecinos trabajan en la central nuclear pero, sobre todo, lo hacen en las empresas que se han instalado en las localidades gracias a su cercanía. Con la gigafactoría se abre una nueva puerta a la esperanza en el futuro para una generación que descarta, en buena medida, trabajar en el campo. La llegada de la compañía china Envision a la zona puede suponer el primer paso para la reindustrialización, no solo de Campo Arañuelo, sino de toda la región. En la comarca, ya empiezan a contemplarla como revulsivo y alternativa, también, a cultivos como el tabaco o el pimiento.
La primera fase de esta factoría se espera que esté lista en 2025 y ya se calcula que generará 3.000 empleos. A partir de ahí, se espera que la industria escale en dos fases más en función de la demanda.
