El dios Dioniso regresa a Tebas para afianzar su culto en esta ciudad y en Grecia. Llega acompañado de su séquito de bacantes, mujeres que han encontrado en este dios a un liberador. Aquí sucederá el enfrentamiento entre lo que defiende Dioniso y la razón, personalizada en el rey de Tebas, Penteo.
"Es un dios extranjero que viene de Asia, el último que entra en el panteón olímpico. Es un dios liberador, sobre todo, para las mujeres", explica Tomás Casatejada, que interpreta a Dioniso. Por su parte la corifeo, Silvia Gómez, destaca cómo "interpretamos como mujeres ese punto de locura, de salir de casa, de ir al monte".
Pero en el mito, esa liberación de las mujeres lleva a la tragedia, la madre del rey de Tebas, mata a su hijo en unos rituales báquicos. El dios se impone a la razón. Ahí está la contradicción y la enseñanza que querían difundir en Grecia con estos textos. Lo explica Silvia Zarco, directora de Párodos Teatro, "miren lo que pasa si las mujeres salen y miren lo que pasa si un dios extranjero viene a occidente. En las obras, se cuestiona todo y se enseña lo que no nos convendría ser".
La puesta en escena cuenta con un cuidada coreografía que refuerza el texto. Celia Carrasco es la encargada de esta parte del montaje, "con movimientos muy fluidos y con golpes, percusión... nos basamos en la danza contemporánea con una mezcla ballet".
Del culto a Dioniso nace el teatro, y así los textos siguen su recorrido a través de los tiempos, ahora con una capacidad crítica que los enriquece.
Este montaje es el último del grupo Párodos Teatro, del IES Siberia Extremeña de Talarrubias. `Las Bacantes´ de Eurípides, fue la obra elegida en el Festival Grecolatino para representarlo en el Festival de Mérida, y ha llegado hasta aquí con un recorrido por teatros romanos de toda la península, también en Grecia, en Messini. Eso se nota en la puesta en escena.