Las Medallas de Extremadura cumplen 34 años. Más de tres décadas en las que se han otorgado 176 galardones a personas, agrupaciones e instituciones.
La máxima distinción institucional de nuestra región fue instaurada en abril del 1986. Y la primera fue para el entonces Rey de España, Juan Carlos I.
Desde entonces, sólo un año no se ha celebrado el acto, en 1987. A partir de ahí cada 7 de septiembre la medalla ha protagonizado un solemne acto en el teatro romano de Mérida. Salvo en 2005, cuando viajó a la ciudad de Cáceres, en apoyo a su candidatura a capital de la cultura 2016.
Hasta 1993 no se reconoció a una mujer extremeña
El galardón tardó en tener nombre de mujer y no fue extremeña. La primera en recibirla fue la soprano Monserrat Caballé. Y hasta 1993 no se reconoció a una fémina de la tierra, la atleta Rocío Martínez Gragera.
La Casa Real ostenta 3 de nuestros distintivos. El último, concedido en 2010 al entonces Principe de Asturias, Felipe de Borbón. Dos años antes, la recibió su madre, la Reina Sofía.
Quien también la recibió de forma extraordinaria fue Juan Carlos Rodríguez Ibarra e, expresidente de la Junta de Extremadura. Se la dedicó al pueblo extremeño..
Sin renuncias pero con una retirada
No se han dado casos de renuncia por parte de los galardonados, aunque el cantante Robe Iniesta mantuvo la incógnita de recogerla hasta el último minuto.
Sí se ha retirado una medalla, la otorgada al nadador paralímpido Enrique Tornero en el año 96. La causa, una condena judicial.
El año que menos Medallas se otorgaron fue en 1988, que se entregó un único galardón al poeta emeritense Jesús Delgado Valhondo. Y la edición en la que más, 20 años después, con 12 galardones. Ya a partir de 2013, modificación del decreto de por medio, se redujo el número máximo de medallas a cinco. Dos años más tarde, se separó el acto político del lúdico.
Este año, la pandemia de la COVID-19 obliga a una nueva experiencia: la de que todos los reconocimientos sean para aquellos que han luchado, y lo siguen haciendo, contra este virus.