1 - Porque conocemos la humildad de ser los primeros
Nuestra tierra nos enseña a ello. Somos la primera región productora de ovino de Europa, de higos y de hoja de tabaco; la mayor productora del mundo de polen de abeja;
la segunda región española en hectáreas de viñedo y en producción de vino, de arroz, tomate y en todo el hemisferio norte nadie alcanza nuestro volumen de producción de ciruela.
2 - Porque si tienes alas, vuelas a Extremadura
La región alberga el 35% de las especies europeas protegidas: Durante todo el año se pueden observar 340 especies de aves. Contamos con la mayor población peninsular de buitre negros y de cigüeña blanca de Europa. Más del 75% de nuestro territorio está incluído dentro del inventario de Áreas importantes para las Aves de España. Y unas 80.000 grullas recorren cada año más de 4000 kilómetros para pasar el invierno junto a nosotros.
3 - Porque somos y hacemos Historia
Forjamos un nuevo mundo, crecimos junto a otro país y creamos el nuestro.
Las fronteras nunca han sido un problema, sino una condición de superación. Extremadura es la cuna de grandes conquistadores: Trujillo, Pizarro, Orellana, Hernán Cortés, Vasco Núñez de Balboa, Inés de Suárez... Son nombres que derribaron los límites y conformaron un mundo nuevo.
En numerosas ocasiones las lindes hispano lusas se han diluido. En 1143, los reyes Alfonso I de Portugal y Alfonso VII de León y Castilla establecieron unos límites iniciales entre ambos reinos. En el Tratado de Badajoz de 1297, se reconoce el Algarve como parte del reino portugués y la zona al este del río Guadiana como parte de la corona de Castilla. Tres décadas más tarde, Dinis I de Portugal y la reina María de Molina firman un acuerdo que cede Olivenza a Portugal. En 1801 un nuevo Tratado de Badajoz, deja Olivenza en manos españolas. Y pese a los acuerdos y firmas, La Raya se salta tratados para converger ambas zonas en un espacio común de historia, arquitectura, gastronomía o perfiles lingüísticos hermános.
Aquí murió un rey y nació España. Un frio enero de 1516, el rey Fernando el católico, enfermo de gota y corazón, se detuvo en Madrigalejo donde decidió escribir un nuevo testamento, en el que proclamaba la unidad de todos sus reinos y nombraba como sucesora a su hija Juana y por consiguiente a su nieto Carlos futuro emperador de España y de Alemania.
4 - Porque tenemos don de lenguas:
Extremadura es una región con una gran riqueza lingüística. Un patrimonio vinculado a su diversidad y producto de su propia historia. Contamos con varias modalidades.
-Como legua oficial el castellano normativo
-El Portugués alentejano se habla en la zona de La Raya.
-A fala se concentra en el valle de Jálama con 3 variantes: valvedeiro lagarteiru y mañego.
-El Extremeño alto se extiende por toda la zona norte de la región mientras el extremeño bajo o castúo es más propio del área del sur.
5 - Porque somos únicos
El puente internacional más pequeño del mundo está en Extremadura, en El marco. Badajoz cuenta con la fortificación histórica más grande de España: más de 6’5 kms de muralla, si incluimos las fachadas de la Alcazaba, el Fuerte de San Cristóbal y el Revellín de San Roque. La única basílica visigoda del sur peninsular puede verse en Extremadura, Santa María del Trampal. El cenobio más pequeño del mundo, El Palancar, se encuentra en San Pedroso de Acim y la calle más estrecha del país en Hervás. Y un dato: somos la comunidad con más bibliotecas por habitante.
6 - Porque Extremadura ilumina
Nuestra región posee casi tantas horas de sol, 3.106 al año, como Arizona, 3.872 horas, siendo una de las mayores zonas de radiación solar del planeta. Extremadura se sitúa en la segunda posición del país en el ranking de las regiones que más energía termosolar producen y la tercera en fotovoltaica. Aquí se ha construido la primera planta fotovoltaica flotante de España y la mayor planta fotovoltaica de Europa, Nuñez de Balboa.
7 - Porque nadamos contra corriente
Tenemos dos playas, Orellana y Cheles; una isla, la del Zújar; el embalse más grande de España y uno de los tres mayores de Europa,La Serena; el lago artificial más grande de Europa, Alqueva; y somos la región de España con más kilómetros de costa de agua dulce 1.500. Y, por si fuera poco... ¿Dónde está el único río que con más de 100 kilómetros su curso corre libre? Ya sabes la respuesta.
8 - Porque aquí el tiempo no pasa, se disfruta
Nuestras estaciones no encierran meses, albergan vida. La naturaleza marca el ritmo: la primavera del cerezo en flor; el otoño mágico del Valle de Ambroz; los inviernos que congelan el tiempo en Las Hurdes o los veranos eternos de La Siberia.
9 - Porque (además de blanca y negra) Extremadura es verde
Más del 34% del territorio extremeño está catalogado como protegido: 14.276 kilómetros cuadrados de los 41.635 totales. Además, Cáceres es la provincia de mayor extensión de monte arbolado de España con 1.029.507 hectáreas, seguida de Badajoz con 891.743 hectáreas. Extremadura es la tercera comunidad autónoma con mayor superficie destinada a agricultura ecológica, 95.417,13 hectáreas, el 5,7% de la superficie nacional. Somos la quinta comunidad autónoma con mayor número de explotaciones ganaderas ecológicas y la segunda en cuanto a número de cabezas de ganado y colmenas ecológicas.
10 - Porque estamos para comernos
De nuestro jamón ibérico ya está dicho todo así que vamos con los quesos premiados en varias ocasiones como los mejores del mundo; con aceites que suben al podium de las catas más exclusivas, los patés que hacen las delicias en la Casa Blanca, las mil y una variedades de miel y confituras artesanas, el cordero o la ternera, las picotas, los bombones de higo, el oro rojo de los grandes chefs, el pimentón de La Vera, los vinos y cavas extremeños.
Y es que el extremeño no nace, escoge. Tú... ¿elegirías algún lugar mejor?
