Ecologistas en Acción de Extremadura ha mostrado su oposición a la gigafactoría de baterías de litio destinadas a la automoción que pretende instalarse en Navalmoral de la Mata (Cáceres), ya que considera que se trata de una iniciativa "inadecuada e insostenible" en el tiempo.
Para el colectivo ecologista, la "supuesta" gigafactoría de Navalmoral ha nacido para sustituir el empleo en la central nuclear de Almaraz (Cáceres) "sin una base sostenible en el tiempo y mediante un polígono originado con dinero público".
Asimismo, ha subrayado que este proyecto "no llega gratis ni a Extremadura ni al planeta, pues la moneda de cambio a entregar es Cáceres o la Dehesa de las Navas y ese no es el camino a seguir para actualizar una economía teniendo en cuenta los límites del crecimiento".
La organización ha recordado que ha galardonado recientemente con los premios "Atila" al presidente de la Junta, Guillermo Fernández Vara, y a la consejera para la Transición Ecológica y Sostenibilidad, Olga García, "por estar vendiendo la región al mejor postor".
"De hecho dijeron sí desde el principio a dos proyectos de minería del litio en la provincia de Cáceres, en los que la oposición de los vecinos ha provocado que al final se presenten proyectos mineros con una fase subterránea un poco menos dañina que la de cielo abierto", ha explicado el colectivo.
No obstante, ha asegurado "aún queda mucho trecho para que se pueda decir que el proyecto de Cañaveral o el de Cáceres, muy sometido a la propaganda de las empresas mineras que cotizan en bolsa, sean realmente sostenibles y libres de afecciones al medio ambiente y al dominio público hidráulico".
Ecologistas en Acción ha denunciado que aunque la provincia de Cáceres sea una de las mejores conservadas de España "ése no debería ser motivo para dañarla gravemente mediante megaproyectos bajo la eterna y falsa excusa del desarrollo económico".
De igual forma, ha hecho hincapié en que el destino de estos grandes espacios industriales ejecutados con dinero público debería ser el de producir bienes básicos para la región, con objeto de evitar las grandes distancias que recorre un bien de consumo, "de esta manera se generaría empleo a la vez que se reducen las emisiones de gases de efecto invernadero".
"Pero resulta mucho más fácil vender Extremadura y sus recursos a los grandes capitales extranjeros a cambio de unas migajas", ha concluido.
