El Gobierno y las propietarias de la Central Nuclear de Almaraz, Iberdrola, Endesa, Naturgy, no han iniciado, por el momento, ninguna negociación para modificar el calendario previsto de cierre de las centrales nucleares. Por tanto, se aleja la posibilidad de que la central extremeña prolongue su vida útil. Todas las señales apuntan en esa dirección, ante la falta de avances.
Cabe recordar que, en 2019, las eléctricas firmaron un acuerdo con el Gobierno para un cierre progresivo de todas las centrales nucleares entre 2027 y 2035. Según ese calendario, el primero de los dos reactores de Almaraz se desconectará en 2027, y el segundo, un año después.
"No han planteado ninguna propuesta al respecto"
La ministra para la Transición Ecológica, Sara Aagesen, ha asegurado este miércoles que las empresas propietarias de las centrales nucleares no han presentado una propuesta conjunta para modificar el calendario de cierre previsto, ni ha mantenido contacto con ellas en ese sentido.“No han presentado una propuesta conjunta y no he tenido ninguna interacción con las tres empresas, ya que no han planteado ninguna propuesta al respecto”, ha declarado Aagesen.
La ministra ha añadido que, si las compañías desean plantear una alternativa, “desde luego les está costando, porque no llega”. En relación con una posible rebaja fiscal para facilitar la continuidad de las centrales, Aagesen ha sido tajante: “Una rebaja fiscal que suponga un incremento en la factura de los consumidores no es una vía que el Gobierno pueda emprender”.
"Si no hay ningún cambio en esa legislación, desde luego no podemos solicitar esta ampliación"
Hasta ahora, el único intento, infructuoso, de las eléctricas para lograr la continuidad de la central ha sido una carta enviada al Ministerio que no cumplía con los requisitos exigidos. No fue una propuesta unánime, ya que Naturgy no la firmó, y planteaba una rebaja fiscal que el Ejecutivo no contempla. Ese, según Iberdrola, accionista mayoritaria, es el principal escollo. Su presidente, Ignacio Sánchez Galán, lo resumía así: “Si no hay ningún cambio en esa legislación, desde luego no podemos solicitar esta ampliación. Incluso aunque sea la mejor solución económica para mantener las luces encendidas”.
Galán advierte de que el cierre de las nucleares encarecería la factura de la luz, y deja la decisión en manos del Gobierno: “El Gobierno tiene que tomar esa decisión. Hay que cerrar, pues se cierra. Pero si hay que mantenerlas abiertas, las mantenemos abiertas. La decisión no nos corresponde a nosotros, corresponde a quienes redactan la política”.
"Vamos a pelear y lo haremos hasta el final"
Las otras dos propietarias de la central, Endesa y Naturgy, por el momento guardan silencio. Mientras tanto, desde Extremadura se sigue reclamando abiertamente la continuidad de la instalación. Así lo reiteraba María Guardiola, presidenta de la Junta de Extremadura: “Vamos a pelear, y lo haremos hasta el final, con todas las herramientas que tengamos, para evitar el cierre de la central nuclear de Almaraz”.
En paralelo, el Consejo de Seguridad Nuclear ha aprobado en pleno el procedimiento que debe seguir Almaraz para tramitar su cierre: los documentos que debe preparar y los plazos para remitirlos. Los primeros deberán estar listos en noviembre, justo dos años antes del cese del primer reactor.
Por su parte, la empresa pública Enresa estudia varias ofertas para adjudicar el diseño del desmantelamiento de la central. El contrato está valorado en 23,37 millones de euros (más de 28 millones con impuestos